Desde que tenemos uso de razón, nuestros padres o parientes nos han inculcado la importancia de reunir dinero para satisfacer una necesidad a corto o a largo plazo.
Desde que pequeños, muchos padres de diferentes culturas han incentivado al ahorro en sus hijos cuando quieren obtener algo en específico. Anteriormente uno de los primeros obsequios de un niño era una alcancía donde se depositaba el dinero que nos daban nuestros padres o parientes en una ocasión especial como nuestro cumpleaños, navidad o simplemente una monedita que sobraba luego de realizar una compra.
Actualmente, sabemos que ahorrar es todo un reto, y por ende la importancia de mantener esta cultura del ahorro y seguir fomentándola.
Cuando tiene un objetivo, el ahorro se convierte en una meta
Hablarles a nuestros hijos sobre el ahorro e incorporarlo como una tarea lúdica les permitirá adoptar este hábito como rutina de vida. Cuando existe el incentivo de guardar dinero para poder obtener la bicicleta deseada, la tablet, el libro o algo que desee y que requiera esfuerzo para lograrlo, ellos se sentirán motivados y por ende su capacidad para apartar ese dinero extra será su principal objetivo hasta obtener lo tan ansiado.
Este incentivo será el inicio de un sinfín de metas materiales por lograr, sin embargo, también es importante hacerles saber que el dinero deberá seguir guardándose no solo para cumplir y obtener por lo que ahorraste sino para cualquier eventualidad.
Del mismo modo es valioso contarles sobre nuestras anécdotas de ahorro cuando nosotros fuimos niños como ellos y explicarles con detalles el por qué y para qué lo hacíamos.
Ahorrar trae consigo grandes ventajas
Cuando el ahorro se convierte en un hábito, los pequeños podrán:
- Valorar más el trabajo y el esfuerzo.
- Se harán más responsables.
- Aprenderán a cuidar más sus cosas personales.
- Diferenciarán los gastos importantes de los caprichos y sabrán a cual darle prioridad.
- La prudencia y la paciencia será una virtud que aprenderán a desarrollar.
Estrategias de ahorro
Haz que el aprendizaje sea más sencillo para tus niños tomando nota de los siguientes tips:
- Háblales sobre las finanzas: explicarles que todos los bienes y servicios que disfrutan tienen un costo y para conseguirlos se tuvo que plantear estrategias de ahorro desde el inicio. Ejemplos sencillos como el tiempo que implica ahorrar para comprar un juguete hará que ellos comprendan que lo que se desea se logra con constancia y la determinación de guardar cada monedita otorgada.
- Iniciemos el ahorro: realizar actividades divertidas como hacer nuestra propia alcancía, será de gran iniciativa para los pequeños, en especial cuando una vez lista, se empiecen a guardar los primeros ahorros.
- Da el ejemplo: si tú sabes ahorrar, ellos verán en ti una guía y sabrán poner en práctica el ahorro.
Cuando recibes educación financiera desde pequeño, podrás ayudar a tus hijos a establecerse metas de ahorro, a no endeudarse en cosas innecesarias y apreciar el valor de lo que se tiene, ya que cada cosa cuesta.
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